Al servicio de este pueblo.

Avui. Viernes, 12 de Mayo de 1978. Página 6.

Información popular.

Una de las formas que resulta más eficaz para dominar a alguien es la de mantenerlo sin información. Una persona sin información no puede ejercer bien su libertad. No se puede elegir lo que no se conoce. Es signo de madurez de una persona o de un grupo saberse buscar la información necesaria para formar las decisiones. Así como un niño no sabe obtener el alimento que necesita y un adulto sí, también la capacidad de obtener el alimento mental que es la información distingue el hombre maduro del inmaduro. En el límite del maquiavelismo no sólo no se informa, sino se trata de desinformar, de dar información errónea para despistar al otro.

Creo que muchos políticos deberían revisar la fea costumbre de acaparar información sin darla nunca. Los partidos populares, a veces, no vigilan bastante el aspecto de mantener su base y el pueblo en general al día de los acontecimientos que les afectan. Hay político que siempre que hablas con él no hace más que pasarte consignas de actuación, secas, cortantes, sin ningún tipo de motivación, sin enseñar nunca las informaciones que le han llevado a considerar aquella consigna como la más acertada del momento. Es toda una estrategia de poder, eso de acumular en las cúspides de los partidos la máxima información y en las bases la máxima ignorancia. Marx, Engels, Lenin, tan discutidos hoy, no actuaban así. Lenin aún hoy es el autor más leído. Ellos todo lo explicaban, todo lo probaban con datos certificables. Siempre avisaban de las fuentes de información en que se basaban sus aseveraciones. Querían que el movimiento obrero fuera un ejército, no de fanáticos, sino de científicos. Huían de las consignas clandestinas intrigantes y misteriosas y estaban en una línea de asamblea perpetua de información y de discusión.

Es ésta una de las cosas que entusiasmaban a Andreu Nin de la forma de actuar de Lenin. Y uno de los motivos que lo decidió a abandonar Stalin, después de la muerte de Lenin, fue la finalización del canje libre y constante de informaciones e ideas que siempre se había practicado en la III Internacional.

Creo que la nueva pedagogía política de la paz exige tener el pueblo informado al máximo de todo lo que le afecta y de darle posibilidades de discutir y profundizar esta información en asamblea.

Lluís M. Xirinacs.