Al servicio de este pueblo.
Avui. Viernes, 3 de Marzo de 1978. Página 9.
Torrelles y Castellbisbal.
Sábado, como que había que ir a Ginebra, tuve que anular una ida en Llorenç del Penedès. Lunes tocó la visita en Torrelles de Llobregat. El martes, en Castellbisbal, del Vallés Occidental. A los tres lugares para hablar de la misma cosa, la necesidad de constituir una asamblea popular a instancia de la gente más activa de cada lugar.
Llorenç del Penedès tendrá que esperar. Torrelles, mil habitantes en invierno y seis mil en verano, despierta de los cuarenta años de marasmo. Hay que renovar el ayuntamiento y en el pueblo hay dos tendencias, una pujolista y otra más a su izquierda. La asociación de vecinos es más pujolista y el grupo de jóvenes quiere ir más allá. Pero es este grupo de jóvenes el que organiza conferencias abiertas para todo el mundo; es el que me ha llamado y está dispuesto al diálogo abierto. Tienen unas comisiones de servicios, de urbanismo y de enseñanza. Ni todo se puede reducir al grupo de jóvenes, ni todo a la asociación de vecinos. Hay, pues, un foro más amplio que lo acoje todo, una asamblea popular. Pero se hace difícil por la excesiva polarización en dos tendencias. Habrá que hacer un esfuerzo democrático, como en los países bipartidistas. Saber perder, saber ganar. Soportarse mutuamente. No condenarse, a pesar de las diferencias. Es un caso muy común en nuestros pueblos.
Castellbisbal, tres mil habitantes, es un modelo muy diferente, aunque el ayuntamiento también se ha quedado atrás. Tiene asociación de vecinos (unos noventa asociados), asociación de padres de familia (noventa), grupo sardanista (veinte y cinco), coros de Clavé (treinta cantantes, doscientos socios), centro cultural y de recreo (doscientos cuarenta), grupo de teatro (veinticinco), grupo de organización de actos culturales (cinco), Unión Excursionista de Cataluña (noventa), centro de esparcimiento (doce), una «Hermandad» de agricultores que trabaja mucho (ciento setenta y cinco), la Casa de Andalucía (ciento diez), padres de alumnos (ochenta), cine amateur (quince), equipo de fútbol Castellbisbal (ciento ochenta), equipo de fútbol Atlético (cien), Sociedad de Cazadores (cien), asociación de propietarios Costablanca (doscientos cuarenta), CCOO, UGT, Unió de Pagesos, PSUC (noventa), CC-UDC (seis), CDC (diez), PSC (cuatro), ERC (trece), el PSOE (dieciocho), etc.
Como se puede ver, Castellbisbal goza de una riqueza asociativa meramente excepcional. Sólo resta la coronación de toda esta gran cantidad de entidades y grupos por una asamblea popular que las integre en un todo armónico, sin aplastarlas ni violentarlas. En la reunión del martes estaban todos los representados y participaron activamente en el proyecto de unión voluntaria de todos los habitantes de Castellbisbal. Están ilusionados y la idea se ve madura. También existe una gran flexibilidad con los diferentes partidos y grupos sindicales.
A caballo entre el Barcelona y el Baix Llobregat, este pueblo puede servir de ejemplo a muchos otros.
Lluís M. Xirinacs.