Diario de un senador.
Mundo Diario. Martes, 18 de Octubre de 1977.
Asesinos (1).
El domingo pasado desde la «Bústia» del diario «Avui», U. A. F. (Barcelona), me pide que conteste públicamente a cinco preguntas. Voy hoy con las primeras:
1. «¿Pedirá que la amnistía llegue al 20 de Septiembre porque así los asesinos de la AAA quedarán libres? Si hay más asesinos (que los habrá) continuará pidiendo amnistía? ¿Hasta qué fecha?».
Ya tenemos amnistía, pero es útil socialmente profundizar en el tema. Yo pedí la amnistía política incondicional para cuando tomó posesión de su cargo el nuevo Jefe de Estado, a finales de 1975. Los atrasos no son culpa mía. ¿Por qué ataca a un buscador de un tratado de paz en vez de perseguir a los que perpetúan la guerra? ¿Se atreve usted a oponerse a la voluntad expresada, hasta hoy, por tanto pueblo y tanto partido político como lo han hecho? Es una amnistía para superar una dictadura y la consecuente espiral de represión y contrarepresión que producen muertes en cantidad. Sin amnistía, siguen las muertes porque siguen las hostilidades. Usted no piensa en la causa de las muertes. Ingenuamente, por evitar tres muertes más, ataca la consecución de un pacto que, zanjando el motivo de la guerra encubierta, evitará cientos de muertes. Y si pido complementos a la amnistía que han dado es para evitar nuevas muertes.
2. «¿Se da cuenta de veras que con su actitud no sólo protege a los que han asesinado, sino también a los asesinos en potencia? ¿También para ellos pedirá amnistía?».
Eso dije yo al ministro del Interior, Martin Villa: «Con el retraso de la amnistía se fomenta la delincuencia». Pero, fíjese bien, «con el retraso de la amnistía», no con la petición de amnistía. Con ella eliminamos una causa permanente de conflictos y de muertes. Según sus ideas, expresadas en el prólogo de su carta, todo el que mata es un asesino. Entonces los militares de todo el mundo serían asesinos en potencia y deberían estar en la cárcel.
3. «Creo que está desmoralizando a la Policía. ¿Por qué han de buscar unos asesinos de izquierda o de derecha si pide que los deje ir inmediatamente?».
Tampoco es culpa del pacificador sino de los guerreros la desmoralización de la Policía. ¿Sabe usted que muchos policías han estado pidiendo insistentemente la amnistía? ¿Sabe que por ello han sido sancionados? ¿Sabe que ellos también necesitan amnistía y que la que se acaba de conceder se refiere también a ellos?
Yo sólo le pediría que hiciese un esfuerzo por ampliar el círculo de su pensamiento y que estudie las causas de las muertes. Casi todas las muertes vienen por enfrentamientos debidos a la incomprensión por parte de unos de los problemas de otros. A lo mejor, como hubiera dicho Camus, hallamos que usted y yo también somos asesinos y no podemos tirar la primera piedra contra nadie antes de corregirnos sobre ciertas cosas.
Lluís M. Xirinacs.