Al servicio de este pueblo.
Avui. Jueves, 18 de Enero de 1979. Página 5.
Hasta la vista.
Antes de las doce de la noche del día 16 fue presentada en la Junta Central Electoral de Madrid la coalición Bloc d'Esquerra d'Alliberament Nacional (Bloque de Izquierda de Liberación Nacional, BEAN) de los Países Catalanes en la que estoy comprometido.
He escrito cada día en este diario desde el 1 de Septiembre de 1977. Ahora haré unas vacaciones.
Me presento a las elecciones del 1 de Marzo como aspirante a diputado independiente en una candidatura que quiere defender al mismo tiempo la clase trabajadora y la liberación nacional de los Países Catalanes, dos opresiones debidas a la misma causa, que suelen defenderse desequilibradamente y aun por separado y que desde hace muchos años trato de defender conjuntamente con igual dedicación. Voy con el Bloc Català de Treballadors (Bloque Catalán de Trabajadores, BCT) y con el Partit Socialista d'Alliberament Nacional (Partido Socialista de Liberación Nacional, PSAN).
No renuncio a mi independencia, pero hago un paso político adelante concretando mi lucha parlamentaria en unos puntos que he defendido públicamente, desde hace ocho años, con palabras y hechos.
En Diciembre de 1970 decía:
«Con la opresión capitalista, aun de parte de los propios catalanes, no puede haber elecciones de verdad. Pero está comprobado que las revoluciones sociales no alcanzan toda la fuerza necesaria si no se alían con las reivindicaciones nacionales. Pido la autodeterminación para los Países Catalanes. Andaluces, murcianos, gallegos, aragoneses, castellanos, cada uno con su lengua, y sus problemas, todos los que han venido a esta tierra para vivir y para trabajar: tenemos el deber de salir de nuestro infantilismo y asumir la plena responsabilidad de nuestra vida. Es necesario que la fábrica sea dirigida por los trabajadores, que la Universidad sea dirigida por los estudiantes y los profesores, que el barrio, el municipio, la comarca, sean dirigidos por quienes los habitan. Es necesario que los sindicatos sean de los obreros. Es necesario que los servicios públicos, la banca, la sanidad, el comercio, la vivienda, la tierra, la información, estén controlados por el pueblo que es el usuario. ¿Por qué el Papá Capital y el Papá Militar y la Mamá Iglesia y la Mamá Televisión son los únicos que saben qué conviene al Bebé Pueblo? Autodeterminación y autogestión quieren decir esto: que todo el pueblo tenga acceso al gobierno de las cosas que son del pueblo. Cataluña socialista. La fuerza viva de la tierra unida al hambre de justicia del mundo obrero. No pedimos nada más. Mandemos». («Vaga de fam per Catalunya. Diari de vint-i-un dies», «Huelga de hambre por Cataluña. Diario de veintiún un días». Editorial Nova Terra).
Hace nueve años que decía eso. Todavía exijo las mismas cosas ante el Parlamento español en el debate constitucional, ante los parlamentarios catalanes en la redacción del Estatuto, ante el pueblo catalán en las nuevas elecciones.
Renuncio durante el período electoral a esta columna, que se convertiría ahora en un privilegio, siguiendo el ejemplo de Josep Verde i Aldea.
¡Hasta la vista!
Lluís M. Xirinacs.