Diario de un senador.

Mundo Diario. Martes, 2 de Mayo de 1978.

Hay parados productivos.

Pasó la Fiesta del Trabajo. Los trabajadores con trabajo se jalearon por las calles, contentos de poder hacerlo sin miedo a las cargas policiales. Los trabajadores sin trabajo se tragaron sus amarguras inconmensurables.

Pasada la fiesta, reaparece la negra situación económica. Hoy quería dejar constancia aquí de algo que me parece realmente ejemplar.

Provincia de Murcia. Rafael de Corsio y Corsio, director general de Empleo, ha puesto en manos del Movimiento Unitario de Parados, 27.913.349 pesetas. Y ellos han emprendido la construcción de escuelas públicas, casas para obreros, obras arqueológicas y una guardería. Se responsabilizan de todo, desde el trabajo de pico y pala hasta preparar los sobres para los sueldos. Trabajo para trescientos hombres durante cuatro meses. Parece que dirige la operación un médico de Cartagena.

Mientras, en Andalucía y Extremadura, por falta de responsables, se gasta un dinero equivalente en cambiar de sitio los mojones de las propiedades de un señorito o en repintar las rayas blancas de un campo de fútbol.

Como contrapunto en Uruguay el general Liber Seregni, candidato presidencial en 1971 por la actual coalición de izquierdas, ha sido condenado a catorce años de reclusión, entre otras acusaciones, por usurpación de funciones públicas, construyó refugios peatonales y limpió basureros convirtiéndolos en lugares deportivos y en jardines infantiles. La acusación se basó en que, en su calidad de presidente del Frente Amplio, Seregni era responsable de todo lo que hacían sus afiliados y estos se «habían arrogado una función típicamente municipal».

Velemos para que aquí nunca más regresemos a esa clase de juicios que niegan de base que el pueblo es el origen de toda soberanía... Aunque, como en nuestro caso sea un pueblo de parados.

Lluís M. Xirinacs.