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Lluís Maria Xirinacs.
Artículos publicados en el diario Avui, cuando Lluís Maria Xirinacs era senador independiente en las Cortes Constituyentes españolas, entre los años 1977 y 1979, traducidos al castellano.
Lluís Maria Xirinacs.
Artículos publicados en el rotativo Mundo Diario, cuando Lluís Maria Xirinacs era senador independiente en las Cortes Constituyentes españolas, entre los años 1977 y 1979.
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Publicaciones:
Lluís Maria Xirinacs.
Agustí Chalaux de Subirà, Brauli Tamarit Tamarit.
Agustí Chalaux de Subirà.
Agustí Chalaux de Subirà.
Agustí Chalaux de Subirà.
Magdalena Grau Figueras,
Agustí Chalaux de Subirà.
Martí Olivella.
Magdalena Grau,
Agustí Chalaux.
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A. Los sistemas monetarios hasta hoy.
Capítulo 1. Delimitación del objeto del
estudio.
- Objetivos y método de este capítulo.
- Contexto histórico.
- Contexto geo-político.
- Conclusiones.
1. Objetivos y método de este capítulo.
La reflexión crítica en torno a los sistemas monetarios
es el núcleo principal de este ensayo. Pero antes de entrar en materia
se dedicará este capítulo a situar los sistemas monetarios
dentro del contexto global en que serán considerados ya delimitarlos
con precisión.
Esta tarea servirá, al mismo tiempo, para dar las definiciones
de los términos técnicos más básicos que serán
utilizados a lo largo de todo el ensayo. Los más especializados
se irán definiendo a medida que sea necesario.
2. Contexto histórico.
Los sistemas monetarios surgen en determinadas condiciones históricas
que es necesario tener presentes. Por este motivo, se los considerará
como fruto de una larga evolución, más concretamente de una
evolución utilitaria de la especie humana. Todos los seres vivos,
y entre ellos el hombre, necesitan disponer de una serie de bienes para
poder desarrollar y realizar mejor su proceso existencial. Denominaremos
estos bienes, bienes utilitarios, para indicar que son útiles
para satisfacer las necesidades materiales de los seres. Todo bien utilitario
tiene, por definición, un valor de uso que es subjetivo,
es decir, relativo al sujeto que es su utilizador.
Por utilitarismo, entenderemos cualquier sistema de producción
y distribución de bienes utilitarios en el seno de cada comunidad
considerada.
En la especie humana se han ido sucediendo históricamente diferentes
tipos de utilitarismo, que describiremos brevemente.
-
Utilitarismo ante-cambiario: es el sistema utilitario más
primitivo, y se caracteriza por el hecho de que la producción de
bienes utilitarios del grupo humano considerado, es enteramente distribuida
en el seno de este mismo grupo, sin que haya intercambio, sino únicamente
partición. El sujeto productor -que no acostumbra a ser un solo
individuo, sino toda una comunidad- es el mismo sujeto utilizador del producto.
-
Utilitarismo cambiario: a partir de un cierto momento de desarrollo
histórico, la comunidad humana intercambia, en su seno y con otras
comunidades, los bienes utilitarios producidos. Así, éstos
adquieren un nuevo valor: el valor de cambio, que es bi-subjetivo,
porque depende de la valoración subjetiva de los dos agentes del
intercambio. Como sinónimo de «utilitarismo cambiario»,
se utilizará el término mercado, y como sinónimo
de «bien utilitario-cambiario» se empleará, corrientemente
el de mercancía.
-
2.1. Utilitarismo cambiario ante-monetario o mercado no monetario:
primeramente, los intercambios de mercancías son realizados de forma
intuitiva, de acuerdo con las conveniencias de los agentes del intercambio,
pero sin referencia a ningún patrón objetivo del valor de
cambio, es decir, sin referencia a ninguna clase de unidades monetarias.
-
2.2. Utilitarismo cambiario monetario o mercado monetario:
a partir de un cierto momento histórico -que podemos situar probablemente,
en los inicios de lo que se denomina «transformación neolítica»-
el intercambio de mercancías se realiza con la mediación
de unas conveniencias reguladoras, patrones del valor de cambio de las
mercancías, que denominaremos unidades monetarias. La referencia
a un patrón de valor convierte el intercambio en un acto, finalmente,
objetivo.
Las conclusiones de este apartado pueden formularse como sigue:
-
Primera: Se considerará que los sistemas monetarios surgen
en el contexto de un intercambio de mercancías suficientemente avanzado
(probablemente, de tipo neolítico).
-
Segunda: Se definirán los sistemas monetarios como instrumentaciones
que tienen por finalidad objetivar el valor de cambio de las mercancías
intercambiadas. Por este motivo, se considerará que las unidades
monetarias, como patrones objetivos para la medida de los valores, son
el elemento básico que caracteriza cualquier sistema monetario.
3. Contexto geo-político.
Fijado el ámbito utilitario-histórico en que se sitúa
el objetivo de este estudio, es necesario ahora considerar sus condiciones
en el presente. Hablaremos, así, de contexto geopolítico,
marco en que se desarrolla cualquier sistema monetario.
Hoy día, se utilizan corrientemente los términos de «Estado»
y «nación» para designar las sociedades en tanto que
organizadas geoestratégicamente. No obstante, si se analizan las
raíces etimológicas de estos dos vocablos, resulta evidente,
no sólo que su uso es equívoco, sino incluso que es totalmente
inadecuado.
Estado es sólo una pequeña parte de la colectividad
total: aquella en la cual la Constitución, consuetudinaria o escrita,
ha delegado el mando político.
Nación quiere decir simplemente, según la etimología
latina, «grupo de nacimiento, grupo en que nacen los seres».
La nación es un hecho natural, común a los hombres y a los
animales, que no tiene nada que ver con la organización política,
la cual es no sólo específicamente humana, sino también
de aparición muy tardía, y de un orden vital completamente
diferente.
Para sustituir estos términos, se utilizará aquí
la expresión, mucho más precisa, de sociedad geopolítica,
definida como persona colectiva, fijada por la historia en un territorio
dado, que evoluciona en función de las cambiantes circunstancias
estratégicas y técnicas, y que está dotada de unos
órganos de mando político (el Estado, en las sociedades
históricamente más evolucionadas) y de mando justicial (la
Justicia).
Todo mercado está inscrito en el seno de una sociedad geopolítica
determinada, o bien se desarrolla entre diferentes sociedades geopolíticas.
En cualquier sociedad geo-política podemos aislar, analíticamente,
la dimensión utilitaria y hablar así de sociedad utilitaria.
En esta sociedad utilitaria, podemos distinguir dos subconjuntos.
-
La sociedad utilitaria productora es una parte (proporcionalmente
más o menos importante, según el grado de desarrollo utilitario
y cultural de cada sociedad) que se ha especializado, multimilenariamente,
en la actividad de producción de bienes utilitarios.
-
La sociedad utilitaria consumidora engloba a todos los miembros
de la sociedad, ya que sin consumo de bienes utilitarios nadie puede sobrevivir.
Cuando nos encontramos delante de un utilitarismo cambiario podemos denominar
también a la sociedad utilitaria, mercado; y cuando en un
mercado se introducen las unidades monetarias, entonces hablaremos de mercado
monetario1.
Es este mercado monetario -entendido como una sociedad especializada
en la producción y consumo de bienes utilitarios, sirviéndose
para ello de un sistema monetario- el que constituirá el contexto
social y político de los sistemas monetarios.
El mercado interior, que tiene lugar dentro de una única sociedad
geopolítica, se prolonga, en el concierto mundial de las sociedades
geo-políticas, por el denominado comercio exterior. Este
puede ser bilateral o multilateral, según modus vivendi más
o menos precario o tratados más permanentes.
Sobre el mercado interior confluyen las fuerzas y condicionamientos
que ejercen todas las legitimas autoridades que tienen jurisdicción
sobre él: Constitución, leyes vigentes, el Estado, la Justicia,
las comunidades étnico-territoriales autonómicas..., los
gremios, sindicatos..., finalmente las empresas.
En el caso del mercado exterior es evidente que estos condicionamientos
provienen de la jurisdicción compartida de las dos o más
partes contratantes.
4. Conclusiones.
A lo largo de este ensayo, se examinará el papel que los sistemas
monetarios han jugado, históricamente, en el seno de los utilitarismos
cambiarios que se han ido sucediendo, y actualmente en el seno del mercado
interior y del comercio exterior de cada sociedad geopolítica.
Nota:
1Es
necesario dejar bien claro que entendemos por mercado monetario
aquel mercado en el cual hay, como mínimo, definida una unidad monetaria.
Esta expresión, no tiene nada que ver con lo que hoy suele significar,
y la usaremos como término técnico en el único y preciso
sentido que acabamos de nombrar.
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