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En aquest lloc «web» trobareu propostes per fer front
a problemes econòmics que esdevenen en tots els estats del món:
manca d'informació sobre el mercat, suborns, corrupció,
misèria, carències pressupostàries, abús de
poder, etc.
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Regalo de Navidad: ¿Hacer o no hacer, he ahí la cuestión?
Las líneas que siguen tienen por objetivo fundamental comentar una interesante nota publicada el 8 diciembre 2008 en la sección "El lector opina", e inserta en el periódico digital "La Vanguardia punto es"… Dicha nota lleva por título "Sonreír a pesar de la crisis", y fue escrita por Alejandra Reyes, quien muy posiblemente es española y residente en Barcelona… Por cierto, Alejandra dice en esa nota muchas cosas que son compartibles, y lo dice además con sentimiento, y lo dice además manifestando gran sensibilidad como probablemente sólo lo pueda hacer una mujer… Alejandra dice llorar cada mañana cuando pasa junto a un grupo de trabajadores que a voces manifiestan estar de paro, y que a voces señalan que desean trabajar… Por cierto, cualquiera se conmueve frente a una situación como esa, porque es realmente muy dura y frustrante, y porque además de la solidaridad que así se pueda despertar en nosotros, en cierta medida también tememos que ello sea premonitorio, en cierta medida también tememos estar mirando un espejo mágico que nos refleja nuestro propio futuro… Obviamente en lo personal tengo una situación económica desahogada, y las oportunidades que me brindó la vida me permitieron viajar bastante tanto por Europa como por América toda… Y por cierto he visto muchas cosas con mis propios ojos… Como dice una canción folklórica uruguaya, en mi trajinar he visto tanta pobreza que naturalmente pensé "Dios por aquí no pasó"… Alejandra se conmueve por quienes tenían trabajo y lo perdieron, pero también es muy conmovedora la situación de quienes ni siquiera piden trabajo porque nunca lo tuvieron, y porque tal vez nunca tendrán ni la más mínima oportunidad de tenerlo… En uno de mis viajes de negocios y estando en Lima, decidí hacerme un espacio para ir a visitar la zona de Machu Picchu… Tomando el tren en Cuzco temprano en la mañanita, y portando mi simpática bolsita de almuerzo, como cada uno de los turistas de ese grupo, pronto el transporte pasó junto a un campo de fútbol donde unos jóvenes peruanos estaban practicando ese deporte… Al pasar el tren, ellos nos hicieron adiós de lejos y sin siquiera arrimarse a nosotros, a pesar de que nuestro transporte iba muy lento, pues en ese tramo debía ejecutar el llamado zig-zag, única forma de circular en tren por zonas de grandes desniveles… Por cierto, la situación al regreso y en la tardecita fue muy otra, pues esos jóvenes nos esperaban, y con mansedumbre pero con evidente desesperación, nos mostraban bolsitas vacías similares a las de nuestro almuerzo, y nos hacían señas inequívocas de que tenían hambre y de que querían comer… Esos jóvenes no nos gritaban probablemente porque no sabían español, y solamente nos hacían señas demostrando estar interesados en nuestras bolsitas conteniendo lo que nosotros no habíamos podido comer durante la jornada… Bueno, hasta aquí las anécdotas muy conmovedoras por cierto, una de Alejandra y otra mía, las que tal vez despierten en los lectores interesantes reflexiones, pero en lo que sigue pongamos particular atención en el mensaje o conclusión que parece desprenderse de la nota de Alejandra… Esta amiga española se pregunta qué hacer, especialmente desde el ángulo de aquellos que desconfían de las concepciones de izquierda, las que se suelen presentar como la única alternativa viable al capitalismo… Y Alejandra también se pregunta porqué hay silencio o indiferencia respecto de otras concepciones ideológicas y respecto de otros proyectos de sociedad; y en este aspecto probablemente nuestra inteligente compañera de ruta piensa particularmente en la propuesta social de Agustí Chalaux de Subirà, muy interesante y prometedor planteamiento que sin duda tiene potencialidades de enormes proyecciones, y que no obstante ello es aún poco conocido y poco debatido… ¿Porqué se habla tan poco de Agustí Chalaux y del Centro Joan Bardina?… ¿Porqué los medios de comunicación social hacen el vacío a este atrayente y original enfoque social, tanto dentro de España como en el mundo todo?… ¿Es que el origen catalán de estas ideas en alguna medida tiene su influencia en relación a esta cuestión, en relación a este estado de cosas?… Y un poco más adelante y en un emotivo arranque de rabia, en su escrito Alejandra manifiesta querer gritar basta, y manifiesta desear organizar una huelga general o una amplia protesta, para así obligar a quienes dominan el planeta a que mejor distribuyan los recursos que han acumulado… Y en definitiva esa es la sonrisa de Alejandra anunciada en el título de su corto manifiesto, pensar en el sufrimiento y en las penalidades de los ricos cuando tengan que compartir lo que han acumulado… Tal vez en lo personal no sea tan emotivo como sin duda Alejandra lo es… Tal vez en lo personal quiera pensar en frío y no en caliente… Tal vez en lo personal sea blando y moderado… Lo cierto es que no estoy enteramente de acuerdo con el sueño de Alejandra, porque en mi fuero íntimo intuyo que si abruptamente se rompe el caótico orden actual, quienes más van a sufrir nuevamente serán los que hoy día son pobres y marginados… En lo personal no veo solución posible dentro del esquema organizativo actual de nuestro cuerpo social, porque no hemos bien construido nuestras relaciones de intercambio, y porque la situación general no se domina desde las cúpulas de poder… Y con la base actual no es posible aspirar a mucho… En mi modesta opinión, la única solución realista a nuestros males sociales está en hacer cambios estructurales progresivos, de forma de poco a poco ir acercándonos a la moneda telemática plena y universal, de forma de poco a poco ir evolucionando hacia un uso generalizado del dinero telemático… Este nuevo orden sí nos permitirá actuar desde las cúpulas y desde toda la pirámide con mucha más eficiencia, racionalidad, y conocimiento de causa, de forma de así poder alcanzar la meta de paz social y de justicia social que en nuestro fuero íntimo mucho de nosotros anhelamos… Y en esta indicada transición o luego de
ella, ¿qué hacer con los narcotraficantes enriquecidos,
o con los opulentos empresarios?… Bueno, si la justicia tiene
algo que decir respecto de ellos, si la justicia puede probarles
algo aún con los imperfectos e incompletos medios de que
se dispondrá en el indicado período de transición,
indudablemente se podrá actuar y se podrá penalizar…
Pero si ese no fuera el caso, pero si a ellos ni siquiera se les
puede probar una coima o un soborno o una quiebra fraudulenta, en
mi opinión entonces solamente hay que sacarse el sombrero
frente a ellos, y de una u otra forma decirles que les aproveche…
En lo personal prefiero justicia y paz para un futuro no muy lejano,
que un revanchismo desordenado que pueda terminar mal… |