Por cierto que en lo personal simpatizo
con el Centro de Estudios Joan Bardina y lo apoyo sin reservas,
por la sencilla razón que veo a esa institución
como la tabla salvadora para la humanidad, por las ideas que promueve
que en lo medular me parecen acertadas y convenientes, y porque
a excepción de esa voz institucional a la que tal vez puedan
agregarse las voces y los dichos de algunos pocos técnicos
y pensadores que dentro y fuera de España se expresan en
términos parecidos, no existe en mi opinión ningún
otro proyecto de sociedad que tenga viabilidad y posibilidades
de éxito como para solucionar las graves problemáticas
sociales y de organización que se plantean y manifiestan
hoy día en nuestra estructura de convivencia
Sin embargo y no obstante lo recién
expresado, en lo personal no adhiero en forma completa a todas
las propuestas y a todas las sugerencias impulsadas por el Grupo
Joan Bardina, y en estos aspectos de disidencia, y en estos detalles
de controversia, corresponde pensar que en algunos casos la razón
puede que se encuentre del lado de la ya citada institución
catalana, mientras que en otros casos tal vez mis enfoques personales
y mis propias recomendaciones sean los más adecuados, y
mientras que en otros casos lo más acertado posiblemente
sea una tercera posición que resta por definir
Hasta hoy día la posible
sustitución del dinero anónimo actualmente utilizado
por dinero virtual, por dinero telemático y escritural,
por dinero telemático nominativo y con algún tipo
de control comunitario o control social, ha sido un asunto muy
poco debatido y muy poco considerado a nivel académico,
y las muy escasas propuestas que en este sentido se han publicado,
y los raros y ocasionales análisis que sobre este tema
se han concretado, obviamente son ellas y ellos de tipo teórico
y especulativo, pues ninguna experiencia seria de implantación
de esta clase de dinero se ha hecho hasta ahora en ningún
país del mundo
En relación a esta materia,
indudablemente debe hacerse camino al andar
En lo que concierne
a este posible instrumento, en relación a esta nueva y
original herramienta, todo está por ser investigado y todo
está por ser evaluado
Sea cual sea el caso, aún
cuando puedan detectarse errores de enfoque en las grandes líneas
del proyecto de sociedad que impulsa el Centro Bardina, ello no
le quita mérito ni a esta institución ni a su principal
impulsor: Agustí Chalaux de Subirà
Y personalmente esta afirmación
me parece cierta e indiscutible, por la sencilla razón
que en los hechos puede decirse que Agustí Chalaux se dedicó
por entero al nuevo proyecto de sociedad durante casi toda su
vida, y porque el Centro Bardina hace ya unos cuantos años
que con firmeza desarrolla su accionar de convencimiento y de
extensión
Así, lo que quiero destacar es que
Agustí Chalaux fue un visionario y un pionero, y que con
mucha constancia fue delineando poco a poco su proyecto de sociedad,
habiendo cumplido esas etapas iniciales en un momento en el que
el desarrollo tecnológico aún no había alcanzado
el grado de avance que tiene hoy día, lo que ciertamente
en su momento imprimía rasgos utópicos e inverosímiles
e idealistas a algunos detalles de lo sugerido por ese inteligente
y perspicaz catalán, por esa fuerte personalidad sin duda
fuera de serie
Agustí Chalaux debe haberse convencido
de la nobleza de las ideas que estaba manejando desde su fuero
más intimo, y con constancia, y con valentía, intentó
promoverlas y defenderlas y difundirlas a capa y espada
De todas formas, a pesar de lo dicho,
a pesar de la brillantez de ciertas acciones puntuales y de ciertas
presentaciones de Agustí Chalaux y de algunos de sus seguidores,
con evidencia los resultados obtenidos por el Centro de Estudios
Joan Bardina hasta ahora indudablemente son magros, hasta ahora
resultan ser notoriamente insuficientes y poco satisfactorios,
pues a nivel general, pues a nivel mediático, en los programas
de radio y de televisión nada o casi nada se dice en relación
al dinero telemático, y en esos medios ni siquiera hay
referencias a la temática para por ejemplo criticar al
Centro de Estudios Joan Bardina en algún aspecto, o para
señalar que el proyecto que esta asociación defiende
en realidad es utópico o descabellado o simplemente absurdo
e inviable
Y con evidencia este asunto tampoco está
en el boca a boca popular, y ni tan siquiera en el ámbito
académico universitario, excepción hecha posiblemente
de lo que ha ocurrido y ocurre en la región catalana o
en la zona de influencia barcelonesa
El panorama por tanto
puede ser considerado como absolutamente desolador
Los resultados
hasta ahora obtenidos por el Grupo Bardina sin duda son frustrantes,
y las metas alcanzadas sin duda son insuficientes e insignificantes,
y esto debe llamar a la reflexión
El Centro Joan
Bardina se expresa en libertad y expone sus ideas en reuniones
presenciales y a través de Internet, y el resto de la sociedad
le deja hacer pero sin prestarle mucha atención
Se
deja funcionar al Grupo Joan Bardina y su accionar se observa
de lejos, como eventualmente se haría con algún
loco, con algún desequilibrado mental, o con algún
soñador cuyas propuestas no tienen ni ton ni son
Con toda evidencia, el posible uso
de la moneda telemática obviamente no está en la
agenda política-gubernamental en ningún país
del mundo, ni tan siquiera en las propuestas programáticas
de algún partido político
Este asuntillo no
ha sido hasta ahora tema de campaña en ninguna contienda
electoral
Y esta cuestión del dinero y de su naturaleza,
tampoco ha sido considerada aunque sea en forma tangencial en
algún organismo internacional
Instituciones tales
como el Fondo Monetario Internacional (FMI) o el Banco Mundial
(BM) o el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) trabajan ellas
con el dinero y con el crédito y con el interés
compensatorio, apoyándose ellas en forma directa en el
sistema financiero internacional y en los distintos sistemas financieros
nacionales, y sin embargo en esos ámbitos no se ha tratado
la temática del posible cambio de la naturaleza del dinero,
ni tampoco se ha abordado la cuestión de la justificación
social íntima del cobro de intereses, ni tampoco ha estado
presente la posibilidad de una sustantiva y profunda reforma de
las bases mismas de los procedimientos internacionales de intercambio
y de compensación
Pareciera como si esos organismos
internacionales tuvieran vedado el abordaje de la temática
reformista
Pareciera como si los altos directivos de esas
instituciones internacionales se sintieran muy cómodos
en las posiciones que han alcanzado, y que por tanto concentran
su accionar de manera que todo se desarrolle de la mejor forma
posible pero sin cambiar sustantivamente el esquema general de
base
Cierto, la inquietud generada por
la actual crisis financiera global ha introducido a prepo el tema
de la reforma del sistema financiero internacional en las últimas
y nerviosas reuniones del G-8 y del G-20, pero allí las
propuestas que en este sentido se manejaron, se referían
ellas a la posibilidad de destronar al dólar estadounidense
como moneda de referencia, y sustituirle por una canasta de monedas
fuertes (por ejemplo euro, yen, dólar, tal vez yuan), o
por una canasta de productos (petróleo, granos, metales)
¡Pero Dios mío, qué
falta de inventiva y qué desubique el de los líderes
mundiales!
Pareciera como que ni ellos ni sus asesores entendieran
que la actual crisis internacional es una problemática
estructural y no coyuntural
Pareciera como que ni ellos
ni sus técnicos entendieran que el capitalismo global que
hoy día tenemos ha desviado su centro de atención,
alejándolo de la llamada economía real, alejándolo
de la llamada economía productiva, para acercarlo a la
economía de expectativas, para acercarlo a la economía
subterránea especulativa e informal, para acercarlo a la
más pura economía financiera y de oportunidad
Lo que hay que comprender es que
el capitalismo que hoy día rige al mundo ha cambiado sustantivamente,
y bien merece ser llamado ahora capitalismo especulativo y desinformativo,
o tal vez capitalismo especulativo y noinformativo, o tal vez
capitalismo subterráneo y borroso
Lo que hay que
comprender es que nuestra estructura básica de convivencia
se ha transformado en un ordenado caos especulativo, o si se prefiere
(por predilecciones o inclinaciones en cuanto a simpáticas
y representativas etiquetas no vale la pena pelearse) en un cuidado
y estudiado desorden muy provechoso para la especulación
y el informalismo y la evasión de obligaciones legales
La especulación y la informalidad y la corrupción
y la defraudación y la ilegalidad y la no documentación
en regla y las avivadas al mejor estilo criollo (tanto a escala
hormiga como a escala corporativa), campean a nivel global, prevalecen
y dominan a nivel general
Y algunos pocos ilusos, y algunas
pocas personas que aún conservan sus ideales morales y
su corazoncito, todavía sacuden la cabeza y se amargan
frente a lo que ocurre, y de vez en cuando intentan dar una limosna
a un pobre para así dejar tranquila a su conciencia de
buen samaritano
No señoras y señores,
ya no podemos seguir pensando que el cumplimiento estricto de
la ley se ha hecho para el vecino y no para nosotros
No
señoras y señores, ya no podemos seguir pensando
en la sociedad como si ella fuera una buena y generosa vaca lechera
que en toda circunstancia nos va a seguir brindando su nutritivo
producto
No señoras y señores, ya no podemos
seguir tirando con meros paños fríos, ya no podemos
apuntalar el edificio con unos pocos durmientes, sino que ahora
ha llegado el tiempo de aplicar cirugía mayor
¡Pero Dios mío, en
los niveles de poder no se les ocurre que la necesaria reestructura
del sistema financiero internacional bien podría consistir
en generalizar el uso del DEG, en generalizar lo que hoy día
se conoce como derechos especiales de giro, y en adoptar esta
especie (hoy día marginalmente utilizada) como moneda fiduciaria
internacional en su sentido más propio!
Pero
¿porqué
se ha dado esta especial situación de poca repercusión
de las ideas de Agustí Chalaux, a pesar de que ya han transcurrido
varios años en los que el Centro de Estudios Joan Bardina
está desarrollando su labor de convencimiento y de extensión?
Alguna causa tiene que haber para la escasa repercusión
hasta ahora obtenida por la entidad española
Por
algo es que las propuestas y las sugerencias de esta institución
catalana han captado hasta ahora tan pocos adeptos
Y al margen de una posible interpretación
del actual estado de cosas, corresponde también preguntarse
sobre cómo sería posible revertir los resultados,
a efectos de en el futuro poder avanzar más rápidamente
hacia la construcción de un mundo mejor, hacia la construcción
de una estructura social verdaderamente telemática en lo
tecnológico, y a la vez socialmente justa, equilibrada,
racional, equitativa
Bueno, a nivel personal, al no haber
conocido personalmente a Agustí Chalaux y al no haber conversado
nunca con él, al no haber nunca visitado al Centro Joan
Bardina, al no conocer detalles ni sobre su forma de financiamiento
ni sobre su relacionamiento con otras entidades, al no haber nunca
participado en un evento promovido por esa institución,
en resumen, al tener tan poca información sobre el Centro
de Estudios Bardina y sobre su forma actual de conducción,
lo único que puedo hacer es especular sobre las razones
por las cuales hasta ahora se ha tenido poca trascendencia, y
especular también sobre las acciones a desarrollar para
cambiar esta situación, para cambiar el presente estado
de cosas
Advertidas mis limitaciones para
el abordaje de esta cuestión, continuaré adelante
con mis elucubraciones, con la esperanza que ellas sirvan, con
la esperanza que ellas sean constructivas, con la esperanza que
los arbitres que personalmente aporte en algún sentido
puedan destrabar la actual situación, ya sea porque las
ideas aquí expuestas tengan real fundamento, ya sea porque
lo aquí aportado sirva como disparador de reales y definitivas
soluciones
Y ya que lo que sigue en buen grado
corresponde a posiciones y enfoques muy personales, posiblemente
corresponde decir algo muy breve sobre quien escribe estas líneas,
simplemente para que sirva de encuadre al eventual lector
Por cierto tengo estudios universitarios, pero nunca he ocupado
posiciones de mando de real relevancia
Y tampoco he sido
un militante destacado de algún partido político,
y por tanto nunca he podido observar muy de cerca a una estructura
de poder y de gobierno, ni siquiera en mi país de origen
Si bien he viajado mucho y por algunos años fijé
residencia primero en Francia y luego en Brasil, nací en
Uruguay y la mayor parte de mi vida la pasé en ese pequeño
país sureño, el que por cierto está muy alejado
de las grandes encrucijadas de este mundo en cuanto a producción
y en cuanto a población y en cuanto a conducción
política internacional y en cuanto a tráfico aéreo
o marítimo
Asimismo, por varios años desarrollé
actividad docente en un par de universidades de mi país,
trabajé también como especialista en organización
para varias empresas comerciales y para varias instituciones estatales,
y desde hace algo más de diez años integro una institución
de bien público y de pequeño porte llamada Grupo
Carlos J Cúdita, entidad que ayudé a fundar, y la
cual entre varias cosas se dedica a impulsar tareas de investigación
y extensión, que en ciertos y determinados aspectos tienen
puntos de concordancia en el enfoque con los que por su parte
desarrolla y defiende el Centro Joan Bardina
Por todo lo
dicho, debe considerarse que mis análisis son hechos desde
una perspectiva muy especial e individual, desde un lugar muy
apacible y más bien alejado de todo, y más bien
ubicado al borde del mapa y donde se termina el mundo
Y
mi parecer personal sobre la temática antes planteada es
el que se indica seguidamente
Evidentemente y por alguna razón,
las propuestas del Grupo Joan Bardina han tenido hasta ahora poca
repercusión a nivel general, y ello ha ocurrido así,
o bien porque ese grupo no puede o no sabe llegar como se debe
ni a los medios masivos de comunicación social ni a los
niveles político-decisorios, o bien porque las ideas defendidas
desde Barcelona tienen intrínsecamente alguna falencia
en concepción y/o en presentación que aleja a la
gente, que aleja a la mayoría de la gente, a excepción
de un pequeño grupito de personas que son convencidas y
que así se transforman en fieles seguidores
Pero vayamos a algunos detalles,
para que las críticas que deseo expresar y para que las
falencias que deseo señalar, no queden ellas en la más
oscura y borrosa de las nebulosas
Con toda evidencia la propuesta
de Agustí Chalaux se centra en las facturas-cheque, o sea
en las órdenes de pago todas ellas telemáticas,
autoexplicativas, y debidamente autorizadas, y eso en mi opinión
es un error
En lo personal creo que lo más conveniente
es centrar el nuevo sistema en el contrato debidamente autorizado
por las partes, por cierto contrato digital autenticado por notario,
y desde el cual automáticamente y oportunamente se expulsarían
las facturas-cheque que pudieran corresponder (una o varias, y
de acuerdo a lo estipulado originalmente en el contrato, o de
acuerdo a lo establecido en las sucesivas y eventuales modificaciones
del mismo)
Claro, los argumentos manejados
por el Centro Bardina en relación a este asunto en una
primera instancia parecen razonables y convincentes, pues en los
videos y en los escritos se suele tomar como ejemplo una venta
de contado, y en esta situación lo usual es que a un contrato
de compraventa de contado le corresponda una sola factura-cheque,
y entonces y en este caso, el contrato digital es muy fácil
de confundir con su correspondiente cumplimiento digital, con
la correspondiente y generalmente única factura-cheque
Otro de los aspectos en los que
me tomo el atrevimiento de apartarme de las propuestas del Centro
J Bardina, es en cuanto al período de transición
entre la actual estructura social y la futura y deseable sociedad
telemática plena
Claro, desde el Centro de Estudios
Bardina se argumenta con mucha razón que los actuales centros
de poder a los cuales la nueva estructura social incomodaría,
léase políticos corruptos, administradores coimeros,
traficantes de armas y de sustancias adictivas, contrabandistas,
defraudadores, especuladores, rapiñeros y ladrones, defraudadores
de impuestos, incluso también trabajadores informales,
infractores de todo tipo y color, y consumidores de sustancias
ilegales, darían dura batalla para que el nuevo sistema
fracasara y/o para que el mismo nunca fuera implementado, y entonces
al concretarse esta oposición sin duda se emplearían
grandes medios y pocas contemplaciones
Si mi memoria no
me falla, me parece recordar que en uno de los videos del Centro
de Estudios Joan Bardina, el presentador argumentó que
la transición debía ser rápida, muy rápida,
para que así los sectores que en apariencia se vieran perjudicados
no tuvieran tiempo de reaccionar, ya que esa reacción podría
llegar a ser muy enérgica y violenta, pudiendo tal vez
llegar al asesinato de los principales directivos de la propia
Asociación Joan Bardina
Bueno, por cierto este comentario
es simpático y gracioso y en algún sentido una humorada,
una bravuconada irónica, una socarronería, pero
comparto plenamente la preocupación de fondo así
señalada, porque ella está acorde con lo que perfectamente
puede llegar a pasar
Lo que no comparto es la solución
Por más rápida que sea la transición, tanto
más rápida y violenta podría ser la reacción
de los opositores
Por otra parte, la sociedad telemática
en su versión madura con certeza no puede ser instaurada
de la noche a la mañana, pues obviamente se requiere infraestructura
física, y también adecuadas resoluciones parlamentarias
y adecuada estructuración normativa, y también capacitación
de usuarios, capacitación de agentes económicos,
y todo ello necesita tiempo para ser conceptualizado y planificado,
así como tranquilidad para su progresivo desarrollo y su
progresiva implementación
¿Cuál sería
entonces la solución para no despertar la ira y la furia
de algunos sectores de poder que se vieran perjudicados con el
nuevo enfoque societario?
Bueno, en mi opinión es
muy sencilla una respuesta a esta inquietud
Lo que debe
hacerse es plantear la implementación de la futura sociedad
telemática en una forma lenta, muy lenta, y de manera que
en este largo lapso de tiempo convivan el dinero telemático
nominativo con el actual dinero anónimo
Así,
con este esquema, los antes señalados centros de poder
de ilegalidad y de corrupción y de informalismo no serían
molestados por un buen tiempo, y por lo tanto y muy razonablemente,
la oposición por parte de esos sectores inescrupulosos
y poderosos tal vez sería entonces limitada y soportable
Por otra parte y como ya se dijo, es necesario todo un desarrollo
normativo y legislativo nuevo, y esto con toda certeza no puede
ser implementado a tontas y a locas, sino en forma responsable
y segura, dándose tiempo para madurar las soluciones y
para dar curso a los debates
Pero además, es impensable
que todos los países se pongan de acuerdo al mismo tiempo
para instaurar la sociedad telemática, y esto sin duda
actuará como válvula de escape, ya que con naturalidad
el narcotráfico y el tráfico de armamentos y la
prostitución y el proxenetismo y otras cosillas de similar
estirpe, abandonarán los países donde se llegue
al uso de la moneda telemática plena y responsable, para
instalarse en los países en donde este progreso se encuentre
más aletargado y sea más chapucero
¿Pero si se decide una implementación
de las reformas que sea ella lenta, muy lenta, y de tipo no universal,
podrían llegar a obtenerse ventajas incluso desde el comienzo
de los cambios?
Bueno, pienso que sí, con
el gran aumento de eficiencia que poco a poco se iría logrando,
los réditos muy pronto serían evidentes y sustantivos,
y provechosos tanto a nivel general como a nivel sectorial o local
Veamos un poco
Pensemos con
cuidado esta cuestión
Tomemos como ejemplo el pago de
salarios y los correspondientes contratos de trabajo asalariado
Bien, en una primera etapa la idea podría ser implementar
la posibilidad de que las empresas pagaran los salarios con moneda
telemática responsable, con moneda telemática autoexplicativa
de transacciones, aunque dejando librada a las propias empresas
la fecha en la que ellas implementarían el cambio de sistema
Inicialmente el cambio al nuevo sistema sería así
totalmente voluntario
Pasado cierto tiempo se comenzaría
a dar una gratificación a los trabajadores que recibieran
sus salarios por la nueva vía, a través de una devolución
en diferido de un punto o de dos puntos de los aportes
Esto
sin duda incentivaría a las empresas a adoptar el nuevo
sistema, pues seguramente recibirían la presión
de sus propios trabajadores
Finalmente, cuando fueran pocos
los salarios pagos a través del sistema antiguo, se ordenaría
la ilicitud de esta forma de pago y el retiro de sustento jurídico
a la misma, con previo análisis de las dificultades que
eventualmente se pudieran plantear en algunas empresas o en algunos
pocos sectores
Pero pensemos ahora en otro asuntillo
Por lo que personalmente he visto en Internet, el Centro Joan
Bardina se orienta en prioridad a difundir las ideas y el pensamiento
de Agustí Chalaux de Subirà, y ello por cierto está
muy bien, y ello por cierto no es criticable en sí mismo
Pero el entusiasmo al realizar esta tarea ha dejado de lado otro
tipo de acciones no menos importantes, ya que no se han creado
amplios espacios de intercambio y de reflexión sobre la
cuestión del dinero telemático, dando allí
cabida no solamente a cosillas complementarias, sino también
a críticas francas a las propias ideas de Agustí
Chalaux en su expresión originaria
Concretamente
¿en qué
estoy pensando?
Bueno, en relación a este aspecto
indudablemente hay un amplio abanico de posibilidades
Por ejemplo, Internet es una vía
muy adecuada para hacer un amplio llamado a una lluvia de ideas
sobre la posible implementación de las propuestas de Agustí
Chalaux
Así, se obtendría posiblemente el
interés y la atención de la gente a un nivel interesante
y en todo el mundo
La competencia entre participantes, el
incentivo de algún premio o al menos de alguna mención
de honor que pudiera ser incluida en un currículo personal,
etcétera, perfectamente pueden ser incentivos a la participación
y a la elaboración de aportes
Luego, los insumos
así recibidos podrían ser publicados en la red de
redes, con comentarios adecuados de un grupito de expertos, con
destaque de los aportes ganadores, y con o sin valoración
del resto de los planteamientos
Otra idea que más o menos
camina hacia el mismo objetivo sería la siguiente
Notoriamente en los últimos años se han popularizado
sistemas donde participan usuarios registrados, quienes tienen
oportunidad de plantear preguntas así como también
de dar respuestas a preguntas planteadas por otros
La participación
en estas comunidades es gratuita, es sin cargo, y para incentivar
la participación, se asignan premios que consisten en puntos
que se otorgan cuando se responde a una pregunta, y también
cuando se da una respuesta o cuando se plantea una pregunta que
luego es bien valorada por la comunidad, etcétera
Así, el incentivo a participar se hace realidad porque
el mecanismo es simpático y divertido, y porque el mismo
plantea cierto grado de competencia entre usuarios
Bien
podría aplicarse un sistema de este tipo aunque orientando
las preguntas (y por tanto las respuestas) a cuestiones vinculadas
con la prospectiva social, y con el futuro incierto, y con el
uso del dinero, y con la sociedad telemática, y con las
ventajas sociales que podrían llegar a obtenerse vía
la tecnología, y con la posible erradicación de
la pobreza, y con la nobleza y conveniencia de las propuestas
de Agustí Chalaux, etcétera
Otra idea similar a las anteriores
y complementaria de las mismas, podría ser concretar un
llamado a un concurso internacional abierto, donde se seleccionaría
el ensayo que sea considerado el mejor de los recibidos
Claro está, la temática que en este concurso se
impondría, estaría vinculada o con la sociedad telemática,
o con el capitalismo comunitario, o con la erradicación
de la pobreza y del narcotráfico, o con la monada telemática,
o con el salario social
en resumen, temáticas que
directa o indirectamente tengan que ver con las ideas y con las
propuesta de Agustí Chalaux de Subirà
Este
concurso internacional abierto bien podría repetirse en
forma regular, por ejemplo cada dos años, para así
ir creando tradición y mayor repercusión
Analicemos ahora otra de las propuestas
de Agustí Chalaux: el salario social en el contexto del
capitalismo comunitario
Bueno, en relación a este
asunto bien podrían formalizarse reproches y reparos por
restricciones y desvíos que eventualmente podrían
surgir en la implementación de esta idea
No me voy
a molestar aquí en desarrollar esta posible línea
de crítica, porque en lo medular personalmente coincido
bastante en la necesidad de implementar un mecanismo más
o menos parecido al señalado por Agustí Chalaux
y a esta posibilidad por cierto apuntaban varias propuestas concretadas
y ampliamente debatidas al interior del propio Grupo Carlos Cúdita,
ámbito que integro y en el que participo activamente
En realidad, hoy día ya se
reconoce la necesidad de ayudar en lo básico a los excluidos
y a los marginados, sólo que no se piensa en darles a ellos
un salario, sino lo que se les da son servicios
Atención
médica en niveles básicos
Ollas populares
y canastas de alimentos
Merenderos fundamentalmente para
mujeres sin ingresos y para niños
Hogares diurnos
para niños de hogares en riesgo social
Refugios especialmente
durante el invierno
Lugares acondicionados para realizar
el lavado de ropa, y orientado a personas o familias que vivan
en situación de calle
En lo medular, lo que Agustí
Chalaux propone es continuar con esta política de asistencia,
solamente que al ser el dinero de tipo telemático, nominativo,
y autoexplicativo de transacciones, en vez de directamente dar
los servicios básicos se podría dar dinero con restricciones
de uso, para que así el propio beneficiario se pueda comprar
lo que necesita y en el lugar que mejor le convenga
¿Y hoy día se podría
hacer algo similar?
Por cierto que no, pues de hacerlo,
buena parte del salario social iría al juego, y/o a los
cigarros, y/o a la pasta base, y/o al alcohol
continuándose
la alimentación en base a lo que se encuentre en la basura
y en los contenedores
y/o continuándose con la vida
en situación de calle
y/o resolviéndose los
problemas que se tengan a través del robo
etcétera
etcétera
¿Y qué ventajas tendría
la propuesta del salario social frente a la provisión directa
de servicios a los más necesitados?
Se mejoraría
la autoestima de los beneficiarios pues ya no habría necesidad
de establecer ghettos para ellos
Se obtendrían mejoras
en cuanto a los rendimientos en la provisión de servicios,
pues las bocas de atención ahora potencialmente se orientarían
a toda la población y no a una parte de la población
Se disminuirían ineficiencias y robos en los programas
de ayuda social
Además se disminuiría la burocracia
en torno a la asistencia social
Sin embargo, si se analizan los
argumentos que usualmente maneja el Grupo Joan Bardina cuando
trata el tema del salario social
por cierto a un observador
atento se le plantean una serie de dudas
¿La población
mundial no podría crecer entonces más de la cuenta,
o lo del salario social iría acompañado de un adecuado
sistema de planificación familiar?
¿Realmente
se plantearía un problema tan grave de desocupación,
por causa de la robotización de las fábricas, y
por causa de la drástica disminución de los trabajadores
bancarios y de los empleados de comercio, que ameritaría
lo del salario social, y/o que ameritaría más amplias
coberturas en materia de seguro de paro?
¿O por el
contrario, la gran desocupación en ciertos sectores provocada
por la implantación de la sociedad telemática, no
podría ser vista como una oportunidad para ampliar el mercado
laboral en materias hoy día no cubiertas o mal cubiertas?
como ser
extendida protección en asistencia social
servicios de esparcimiento
creación renovada de obras
artísticas y literarias
mejoras en los servicios
de salud y en atención psicológica
mejoras
en materia educativa y cultural
mejoras en calidad y en
alcance en los programas de recapacitación laboral
reflexión filosófica
potenciación y
jerarquización de ciertos roles, como por ejemplo el del
animador social
Otras de las críticas que
se podría realizar al Centro de Estudios Joan Bardina es
al poco destaque que esta institución hace en cuanto a
la documentación de trazabilidad
Con toda evidencia,
este tema no está totalmente ausente en los documentos
y en los videos auspiciados por el Grupo Bardina, pero en mi opinión
esta cuestión ciertamente tiene una gran importancia, una
enorme importancia, y la institución catalana no enfatiza
ni resalta suficientemente este asunto
Obviamente, debe
comenzarse por la trazabilidad del dinero y de los activos financieros
Obviamente, debe comenzarse por la introducción del dinero
telemático, nominativo, y autodocumentado
Pero luego
debe continuarse con la trazabilidad de servicios, y con la trazabilidad
de productos alimenticios, y con la trazabilidad de materias primas,
y con la trazabilidad de herramientas, y con la trazabilidad de
ciertos importantes productos finales, etcétera, etcétera
Una cosa va de la mano de la otra
La mejor manera de lograr
implementar una especie dineraria que sea telemática, que
sea nominativa, y que bien documente transacciones, es implementar
también sistemas subsidiarios de trazabilidad de todo aquello
que pueda ser contrapartida de una transferencia dineraria
Otra de las cosas que en lo personal
me llama la atención, es el poco éxito que en apariencia
ha tenido el Grupo Bardina en cuanto a acceso al financiamiento
público, y en cuanto al aprovechamiento de la infraestructura
pública dentro y fuera de España
Por ejemplo,
el Servicio Exterior de España mantiene una serie de centros
culturales esparcidos por todo el mundo, y en dichas entidades
con frecuencia se realizan muy interesantes actividades culturales
y educativas en cuanto a conferencias, exhibición de filmes
y de videos, mesas redondas, muestras visuales, etcétera
¿Es que no se podría por ejemplo allí exhibir
los videos del Centro de Estudios Bardina, exhibición que
podría ser luego seguida de un debate con participación
de los asistentes y de ciertos referentes?
Bien, este escrito tal vez se ha
extendido más de la cuenta, así que corresponde
ir pensando en terminarlo
Me pregunto qué impresión
puede haber dejado al lector el análisis de estos apuntes
Y me pregunto también que opinará el lector sobre
quien ha escrito estas líneas
Posiblemente piense
que no tengo calificaciones suficientes como para haber abordado
estos temas en la forma que lo hice
Posiblemente piense
que todo esto es una especie de gramática parda, audazmente
desarrollada por alguien que se tomó el atrevimiento de
abordar temáticas prospectivas con enfoques novedosos y
arriesgados, intentando así derribar paradigmas para en
su lugar ubicar otros nuevos
Sea cual sea la opinión del
lector, me sentiré personalmente satisfecho si este trabajo
contribuye a ubicar la temática de la moneda telemática
en la agenda mediática y política
Que así
sea
10/12/2008 JC Anselmi
¿Para dónde vamos?
Con toda evidencia, en estos primeros
años del siglo XXI están sucediendo hechos insólitos
y negativos para la humanidad
Uno de ellos es la crisis financiera
que está afectando a varios países en este año
2008 que ya casi está por terminar
Pero además, el narcotráfico
y el terrorismo parecen que se fortalecieran y se expandieran
cada día más
Y por otra parte, los cataclismos
naturales, el hambre, y la miseria, afectan ya a una población
excesivamente importante, exageradamente importante, insólitamente
importante
Y por otra parte, las agresiones políticas
y la delincuencia común, instauran en muchísimas
poblaciones un sentimiento generalizado de inseguridad y de impotencia,
que incluso en algunos casos se acerca al terror, o al pánico,
o a la casi certeza que nunca podrá obtener justicia
¿Qué nos está
pasando como especie?
En este fin del año 2008 los
Jefes de Estado y otros poderosos organizan reuniones y tienen
numerosos contactos entre ellos, pero en lo personal espero poco
de positivo de las iniciativas que puedan tomarse en esos niveles,
por la sencilla razón de que esos poderosos parecen no
comprender qué está pasando con nuestra estructura
social
En mi modesta opinión, una
mejora sustantiva de nuestra organización social podrá
ser lograda, si se llega a tomar conciencia generalizada de la
importancia que podría tener la sustitución del
actual dinero anónimo, por dinero telemático y escritural,
por dinero nominativo y sin base material, tal como a mediados
del siglo pasado Agustí Chalaux de Subirà soñaba
que esto podía llegar a ser realidad
Publicado por Juan C Anselmi el día 12/10/2008 10:10:00
AM.