Penedès Econòmic. Junio de 2022. Página 22.
Hay que saber aprovechar las Turbulencias de la Vida.
Dolors Marín Tuyà. Psicóloga y miembro del Grupo de Investigación Globàlium de la Fundación Randa - Lluís M. Xirinacs.
Desde Euclides, tendemos a pensar los objetos como estructuras sólidas rígidas constantes y nos cuesta imaginarlos como olas fluidas. En el Globalium de Xirinacs, la Turbulencia se acerca al Fenómeno (tiempo) y al Plasma elemental turbulento fenoménico o al magmático nouménico haciendo desaparecer el Objeto (espacio) de estructuras estáticas.
Turbulencia es agitación, Caos original real y concreto, desde la vertiente fenoménica; la Experiencia más radical (nuclear, hadrónica, leptónica y fotónica) en la radicalidad fenoménica, inherente e insoslayable. Las turbulencias son experiencias cambiantes plásmicas. Las Turbulencias superficiales no se intercompensan con las turbulencias profundas.
La Experiencia de Turbulencias en macrofísica y en macropsíquica, sea en la materia, la vida o la sociedad, emocionan. Si en el macromundo se menea la materia accidentalmente turbada y movediza, en el micromundo es plasma caótico, radicalmente turbado y movedizo. El desorden turbulento puede ser intrínseco (azaroso), extrínseco (choque ciego entre objetos) y también puede ser manifestación de libertad subjetiva.
Disturbios, grescas, revoluciones, guerras sociales expresan la voluntad subjetiva conjunta de cambiar el orden o la razón establecidos. A escala biológica pasa lo mismo con las enfermedades, mutaciones, glaciaciones y sequías, extinciones, muerte de los pluricelulares. Y en el ámbito físico, con cataclismos e implosiones galácticos, colisiones entre astros, huracanes, diluvios, inundaciones, mareas, terremotos, tsunamis, volcanes, rayos, incendios. Porque también hay libertad en el ámbito animal, vegetal y mineral.
La libertad sube desde la raíz y se extiende por todos los escalones. Hay que saber aprovechar, tanto en situaciones humildes como en situaciones grandiosas, este acceso a la libertad radical a través del desorden y de las Turbulencias de la vida. Hay que saber ver en positivo los cualificados desastres, desbarajustes, catástrofes, caos, accidentes. Son el anuncio emergente de la creatividad primigenia en forma concreta y experimental. Cuanto más irracionales, desconcertantes e imprevisibles sean las Turbulencias, más directamente nos enseñan las raíces olvidadas, ninguneadas, resecas... muertas.
Dolors Marín Tuyà.
Psicóloga y miembro del Grupo de Investigación Globàlium de la Fundación Randa - Lluís M. Xirinacs.
