Carta abierta a Nicolas Sarkozy
Estimado Señor Presidente
Nicolas Sarkozy:
Hace algunas semanas escribí
a usted una carta en francés de contenido similar al que
ahora aquí desarrollo en español. El motivo es claro:
personalmente deseo que los conceptos aquí vertidos puedan
ser comprendidos por el mayor número posible de personas.
Pido perdón anticipadamente al eventual lector, si en este
esfuerzo no logro expresarme con la precisión y con la
claridad que naturalmente en lo personal desearía.
Y le dirijo estas líneas
Señor Presidente, porque hace poco tiempo leí sus
declaraciones públicas en relación a la crisis financiera
mundial, y en consecuencia tengo el deseo y el interés
de felicitarle, pues sus observaciones y sus propuestas me parecen
que responden adecuadamente a los desafíos actuales.
Le solicito encarecidamente de continuar
esta línea de acción, en el marco de la política
europea, y sobre todo durante las reuniones del G-8 y del G-20
en las que seguramente usted participará en el correr de
los próximos tiempos.
Además, llamo vuestra atención
sobre dos aspectos que personalmente pienso son muy importantes.
El proyecto del uso del bancor
como moneda internacional oportunamente propuesto por John Maynard
Keynes en los años cuarenta.
Las posibilidades muy positivas y muy convenientes que podrían
adquirirse si se emplea dinero telemático y escritural
tanto en la economía internacional como en las distintas
economías nacionales.
En mi modesta opinión, el
bancor telemático es perfectamente realizable, y por lo
tanto, es muy aconsejable que se estudie esta cuestión
en profundidad y con seriedad.
Antes de terminar estimado Señor
Presidente, desearía señalarle que en España
desarrollaron una investigación por cierto muy interesante
en relación al dinero telemático. Me refiero a los
papeles de Magdalena Grau Figueras y de Agustí Chalaux
de Subirà. Estos trabajos se encuentran publicados en el
ciberespacio, y allí son muy fáciles de localizar
utilizando un buscador. Opino que sería muy oportuno que
usted pidiera a sus asesores que analicen esta propuesta española,
para así evaluar su posible interés.
Reciba usted Señor Presidente,
la expresión de mis mejores sentimientos.
16 Diciembre 2008 by worldmediapuntoes